Una monumental estatua ecuestre de Simón Bolívar, Libertador de Venezuela y otros cuatro países de América del Sur, se inauguró este miércoles en la intersección de las avenidas Vernadski y Universitetski de Moscú, capital de la Federación de Rusia, dedicada al 240° aniversario del nacimiento del prócer, nacido en Caracas el 24 de julio de 1783.
En la inauguración de la imponente escultura de bronce, que marca un nuevo hito en las relaciones entre Venezuela y Rusia, participaron, entre otros, el ministro de Petróleo venezolano, Pedro Tellechea; la alcaldesa de Caracas, Carmen Meléndez; el embajador de Venezuela en Rusia, Jesús Salazar Velásquez; el vice primer ministro ruso; Aleksánder Nóvak y el embajador de Rusia en la nación suramericana, Serguéi Mélik-Bagdasárov, así como el director del Departamento de América Latina de la Cancillería rusa, Aleksánder Schetinin.
«Al pueblo ruso del pueblo venezolano con motivo de la celebración de los 240 años del natalicio del Libertador Simón Bolívar», se lee en el pedestal, instalado en el mismo lugar donde, en 2010, el comandante Hugo Chávez colocó la primera piedra durante su visita a Moscú.
«Siento un orgullo inmenso de aquella primera piedra que el comandante Hugo Chávez puso en este lugar el 15 de octubre de 2010. Hoy la vemos consolidada», manifestó el embajador Salazar Velásquez frente a la estatua de más de ocho metros de altura –incluido el pedestal–, una réplica más grande de la ubicada en el centro de la plaza dedicada al Libertador en el casco histórico de Caracas, obra del maestro italiano Adamo Tadolini.
Relaciones estratégicas
El ministro de Petróleo de Venezuela, Rafael Tellechea, resaltó «la hermandad que existe hoy» entre los dos países y se mostró complacido con los convenios bilaterales en áreas como la salud, el transporte y el deporte firmados durante su presente visita al gigante euroasiático.
Al respecto, el vice primer ministro ruso, Alexandr Nóvak, calificó como «estratégicas» las relaciones con Venezuela, unos lazos que, según sus palabras, «no dependen de las coyunturas».
El escultor venezolano Manuel Suescun estuvo trabajando en el monumento durante varios meses antes de entregarlo a la fundición, para lo que se empleó la técnica de moldeo a la cera perdida, conocida desde la antigüedad, manifestó el fundidor Francisco Hernández.
Al intervenir en la apertura del monumento, la alcaldesa de Caracas, Carmen Meléndez, abogó por estrechar los lazos con Moscú. En su cuenta de Twitter compartió información técnica sobre el monumento: “La escultura tuvo 3 etapas: modelado, fundición y ensamblaje e instalación. El modelado se hizo en Mucuchíes, Mérida, con 5 toneladas de arcilla, y luego la fundición y armado”.
Además, detalló que “con un 70% de soldadura, en Moscú concluyó este trabajo y la pulitura, hasta colocarse en su pedestal. La escultura del Libertador pesa 3 mil kg, tiene un volumen neto de 4,5 m3, volumen de ocupación de 39.77 m3, ancho de 5 mts y altura de 4,30 mts.”.