¿Conocías esta planta? Descubre el paso a paso para sembrar caladios en casa y así llenar de colores tu jardín.
¡Llegó la primavera! El tiempo perfecto para llenar de color cada espacio de tu hogar. ¿Estás incursionando en la jardinería? Entonces, ¿qué te parecería sembrar caladios en tu casa?
Esta planta tropical de follaje grande y vistoso puede ser una excelente adición. Además, es fácil de cuidar y no requiere mucho espacio.
En este artículo te hablaremos sobre los caladios y, además de conocer sus variedades, ¡te enseñaremos cómo plantarlos!
Características generales de los caladios
Los caladios son plantas herbáceas con tubérculos que pertenecen a la familia Araceae. Son autóctonos del trópico de Sudamérica y se introdujeron en Europa a mediados del siglo XVIII.
A partir de ese momento, se han convertido en una especie popular para interiores y exteriores, debido a su fácil cuidado. Aunque pueden crecer hasta 1,5 metros de altura, en promedio suelen alcanzar los 30 centímetros.
Uno de los aspectos más llamativos de los caladios es la densidad de su follaje. Sus hojas pueden alcanzar un tamaño de alrededor de los 15 centímetros de ancho y 45 de largo.
Además, tienen variedad de formas y colores. Desde el blanco al verde, rojo, rosa y naranja con motas o vetas. Añaden un toque de vivacidad a cualquier jardín.
Especies de caladio que puedes sembrar en tu casa
De acuerdo con una publicación de Floriculture and Ornamental Biotechnology, el número exacto de especies de caladio es todavía objeto de discusión, variando de 7 a 17 según la clasificación que se consulte.
A continuación, te presentamos algunas de las más populares y conocidas en jardinería:
- Caladium bicolor: esta variedad de caladio es la más frecuente y ha sido objeto de mejoras genéticas para crear híbridos. Su follaje es mayormente verde, adornado con venas de tonalidades rojas o blancas, mientras que sus espatas pueden ser amarillas o blancas.
- Caladium hortulanum: las hojas de esta especie son particulares, ya que su textura se asemeja a la del papel.
- Caladium humboldtii:tienen hojas pequeñas con tonalidades verdes, las cuales presentan un patrón de manchas o jaspeado en blanco de diversos tamaños y formas.
- Caladium picturatum: presenta hojas alargadas con venas de color blanco.
- Caladium steudneri folium: aunque menos popular que otras variedades, tiene hojas verdes brillantes, ligeramente jaspeadas de blanco, que son cerosas y asemejan la forma de un corazón.
¿Cómo sembrar caladios en casa?
El cultivo de los caladios puede darse por dos vías:
- Multiplicación por tubérculos.
- Siembra de semillas.
¡Sigue leyendo para enseñarte el paso a paso sobre cómo sembrar caladios en casa! Así podrás disfrutar de sus hermosas hojas grandes y vistosas.
1. Multiplicación por tubérculos
Para sembrar los caladios en casa se puede plantar el tubérculo completo o dividirlo en varias partes, asegurándose de que una de ellas tenga, al menos, dos yemas. Antes de plantarlos, es recomendable tratar las áreas de corte con un fungicida de amplio espectro que contenga azufre. Luego, los dejas secar durante uno o dos días.
Entiérralos a una profundidad de 2 a 3 cm en una maceta o en el jardín. Durante esta etapa, procura no regarlos con frecuencia y mantenerlos a una temperatura que oscile los 20 a 27 °C, hasta que brote la cuarta hoja.
Posteriormente, puedes trasplantarlos a una maceta más amplia y utilizar sustrato rico en materia orgánica con un poco de arena. De esta manera, facilitarás el drenaje de agua. A partir de ese momento, el riego deberá ser regular.
2. Siembra de semillas
Si decides multiplicar los caladios por semilla, es recomendable esperar a la llegada de un clima templado, asegurándote de que la temperatura ambiente no supere los 20 °C. Para el proceso, solo necesitarás preparar una bandeja con un sustrato ligero y arenoso.
Allí enterrarás las semillas, cubriéndolas ligeramente, para asegurar la humedad durante el periodo de germinación. Es fundamental mantenerlas con poca luz y con el sustrato siempre húmedo, a una temperatura que oscile entre 20 y 23 °C.
En caso de que haya mucho viento, lo ideal será cubrir la bandeja con un cristal o plástico. Con periodicidad, retira el cobertor para evitar el exceso de humedad.
Una vez que las semillas germinen, quita el plástico o cristal y aumenta la cantidad de luz que llega. Asegúrate de alejarlas de la luz directa del sol y que reciban buena ventilación.
En caso de detectar plántulas débiles, elimínalas para darle a las robustas un mayor espacio para desarrollarse. Luego, cuando tengan algunas hojas, trasplántalas a macetas pequeñas, con cuidado de no dañar sus raíces.
Las primeras hojas serán todas verdes, ya que el color de la variedad comienza a manifestarse a partir de la sexta o séptima hoja.
¡Mucho cuidado con las plagas!
Al incursionar en el cultivo de caladios, es clave prestar atención para evitar plagas y enfermedades. El pulgón, la araña roja y los ácaros son algunas de las más comunes. Pueden ocasionar serios daños en las hojas.
Para evitarlas, debes controlar la humedad y la cantidad de sol que reciben, así como mantener la limpieza en el jardín. Con el fin de prevenir enfermedades ocasionadas por hongos y bacterias en los tubérculos, utiliza un sustrato ligero y gestiona el riego.
Tomando estos cuidados, podrás disfrutar de caladios saludables en tu jardín.
¡Cuida tus caladios para darle vida a tu jardín!
Los caladios requieren algunos cuidados adicionales para crecer sanos. ¡Toma nota de los más importantes!
- Procura ubicarlos en una zona muy luminosa, pero asegúrate de que estén alejados de fuentes directas de luz natural o artificial.
- Ofrece un suelo a base de turba de reacción ácida, mezclado con arena y con buen drenaje.
- El suelo debe estar húmedo, pero nunca encharcado.
- Trasplanta una vez por año y abona cada dos semanas con humus de lombriz o un fertilizante líquido diluido con el agua de riego.
- No los podes. Los caladios eliminan poco a poco sus hojas de manera natural.
¡Listo! Ahora ya conoces todos los detalles para sembrar caladios en casa. Disfrutar de la belleza y alegría que aportarán en tu jardín.
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